La industria textil registró números preocupantes durante el bimestre mayo-junio de este año comparando con el nivel de actividad del mismo período de 2023, tratándose de cifras que estuvieron incluso por debajo del ya negativo bimestre marzo-abril, según un relevamiento del sector llevado a cabo por la Fundación Pro Tejer.

Esto deja a los productores textiles en una ''situación alarmante'', advirtieron desde la entidad, que detalló que se registraron más de 5.000 despidos y 10 mil suspensiones.

A su vez, indicaron que ''luego del récord de inversiones de los últimos 3 años (que superaron los USD 1.400 millones), hoy 6 máquinas de cada 10 están paradas''.

El informe también detalla que casi el 80% de las empresas registraron caídas promedio del 40% en el volumen de ventas y en la producción interanual durante la temporada de otoño-invierno, mientras que al mismo tiempo el 76% retrotrajeron la utilización de la capacidad instalada, representando una caída del 29%.

La industria textil atraviesa una crisis marcada por el desplome de ventas y los despidos. (Fundación Pro Tejer)

La caída en los niveles de actividad producto de la baja de ventas forzó al 45% de las empresas a reducir su planta de personal en junio con respecto a diciembre, con recortes del 16% en promedio. Y las inversiones también quedaron casi paralizadas: el 84% del sector declaró que optará por no invertir más capital.

En lo que respecta al plano financiero, el 40% de las empresas sostuvo que tiene problemas para afrontar gastos corrientes, y un preocupante 81% piensa que, con el actual tipo de cambio, es muy difícil competir en el mercado internacional.

El relevamiento de la Fundación Pro Tejer arrojó que un 90% de las empresas que recortó su producción atribuye el problema a la caída de poder adquisitivo de la población. Otros factores mencionados fueron las expectativas macroeconómicas y el cambio del clima de negocios, el cambio de políticas sectoriales, el ingreso de productos importados y la devaluación de diciembre de 2023.