Dentro de las tendencias que giran en torno a métodos que priorizan el bienestar emocional, se encuentra un nuevo método denominado "RAIN". Desarrollado por la psicóloga estadounidense Tara Brach, el método busca controlar emociones negativas a partir de su reconocimiento y posible gestión, en vez de la evasión de lo que sucede.
Tal como sucede en el film "Intensamente 2", Ansiedad utiliza la imaginación de la protagonista para crear y proyectar escenarios negativos, aunque su objetivo es protegerla. Al igual que sucede con las propias emociones, Ansiedad toma el control de la mente volviéndola problemática; sin embargo, si se toma conciencia de las propias emociones, es posible una buena gestión y superación (como le sucede a la protagonista del film).

Método RAIN
Según Brach, sólo puede superarse una emoción negativa a partir de tomar conciencia sobre ella. Así surge RAIN que, con sus cuatro pasos, invita a un momento de introspección. Los pasos son "Recognize-Allow-Investigate-Nurture", o, en español, "Reconocer, Aceptar, Investigar y Cuidar/Atender".
-Reconocer lo que ocurre: Muchas veces es más fácil detectar "culpables" en vez de dar un psao atrás y analizar qué está generando en uno mismo eso que sucede. El momento a solas y de introspección brinda un reconocimiento completamente necesario para entender lo que está afectando y la forma en que esto se siente interiormente. En conclusión, el primer paso es reconocer que se está atascado y que sujeto a creencias, emociones y sensaciones que constriñen dolorosamente.

-Aceptar plenamente la experiencia: Se trata de aceptar las emociones sin rechazarlas. Instintivamente se tienden a despreciar las emociones negativas ya que mostrar "el lado malo" no suele ser aceptado. En esta ocasión, la experta invita a que uno se permita que los pensamientos, emociones, sentimientos y sensaciones existan sin intentar evitarlos. Se puede ofrecer a uno mismo palabras amables o frases de ánimo en silencio para reconocer y aceptar lo que se siente allí.
-Investigar por qué está ese sentimiento: La introspección permite identificar el origen del problema. Para ello, existen dos técnicas clave: escribir y hablar. En ambos casos, es posible volverse consciente de lo que se piensa o siente, pudiendo verbalizar o escribir lo que sucede. Además, la conciencia permite dirigir la atención a las sensaciones corporales en lugar de intelectualizar lo que ocurre en el interior.
-Cuidarse con autocompasión: Para finalizar, una vez descubiertas las propias necesidades debe responderse a las mismas y atenderlas. Analizar qué se necesita y ofrecerse a uno mismo un gesto amable para satisfacerse: palabras tranquilizadoras, de perdón, compañía, amor a uno mismo, entre otras.
Fuente: GQ.