Milicic: talento argentino que trasciende fronteras con innovación y compromiso

Con tecnología de punta y un equipo multidisciplinario, Milicic desarrolla defensas ribereñas clave en Perú, destacando la capacidad de la ingeniería argentina

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Desde Rosario hacia el mundo, Milicic, con más de 50 años de experiencia en construcción y servicios, avanza en su segundo proyecto en Perú. Esta vez, la empresa asume el desafío de desarrollar las Defensas Ribereñas del Río Zaña y la Explotación de Cantera de Roca, un trabajo que no solo protege a las comunidades del norte peruano de inundaciones, sino que también demuestra el alcance y la capacidad de la ingeniería nacional.

Con base en el departamento de Lambayeque, este proyecto abarca la construcción de diques, enrocados y nuevas defensas ribereñas que buscan mitigar los riesgos de erosión e inundaciones en una región que históricamente ha enfrentado estos problemas. El desarrollo también incluye la explotación de la cantera Quechuas VII, con un suministro estimado de más de 774.000 metros cúbicos de roca, esencial para las obras hidráulicas.

Innovación y tecnología: el sello distintivo

Un aspecto que marca la diferencia en esta obra es la implementación de la tecnología Machine Control, un sistema que permite una precisión milimétrica en los procesos constructivos. Este enfoque no solo reduce los tiempos de ejecución, sino que minimiza el impacto ambiental, un compromiso que Milicic ha mantenido a lo largo de su trayectoria.

Con una duración estimada de 14 meses, el proyecto moviliza un equipo multidisciplinario de más de 130 máquinas y genera más de 340 puestos de trabajo directos, dejando en claro que el crecimiento regional y el aporte al desarrollo comunitario son prioridades innegociables.

Liderazgo en cada detalle

El legado de Milicic en el rubro de la infraestructura se construyó sobre la base de valores sólidos, profesionalismo y una búsqueda constante de la excelencia. En Perú, el equipo afronta un desafío integral: desde el diseño y ejecución de las defensas hasta la integración paisajística que mejora la convivencia con el entorno natural.

“La precisión, la innovación y el trabajo en equipo son pilares fundamentales para enfrentar cada proyecto”, destacó Eduardo Prudencio, parte del equipo que lidera las tareas en el Río Zaña.

Presencia rosarina que trasciende fronteras

Para quienes conocen de cerca el mundo de la construcción y la ingeniería, el nombre Milicic no necesita presentación. Con una historia que comenzó en Rosario y que hoy se expande a nivel internacional, la empresa continúa siendo un referente de calidad.

El proyecto en Perú es un recordatorio de que las empresas de la región no solo pueden competir en mercados exigentes, sino también liderar en innovación y sostenibilidad. La obra no solo protege a comunidades peruanas; también muestra que, con visión y trabajo, las soluciones reales trascienden las fronteras y dejan huellas que perduran.

Construcción con impacto sostenible

En un contexto de creciente atención a los efectos del cambio climático, el proyecto del Río Zaña incorpora prácticas sostenibles como la reutilización de materiales y sistemas de manejo eficiente de aguas pluviales. Estas acciones no solo refuerzan la seguridad de las obras, sino que también ratifican el compromiso de Milicic con el desarrollo responsable.

A la par de estas innovaciones, el proyecto también contempla la implementación de un sistema de alerta temprana para prevenir desastres y proteger a las comunidades ante posibles emergencias, una medida que responde tanto a la experiencia acumulada como a la visión de futuro que caracteriza a la empresa.

Orgullo local, impacto global

Con más de 800 proyectos realizados en distintas áreas como minería, energía y obras de oil&gas, Milicic demuestra que el talento y la capacidad técnica pueden posicionar a empresas de origen rosarino en los más altos estándares internacionales. Cada obra, más allá de sus objetivos técnicos, lleva consigo el espíritu de quienes conforman esta compañía: desde el ingeniero que planifica, hasta cada trabajador que hace realidad lo proyectado.

Sin estridencias, sin alardes, pero con pasos firmes, Milicic sigue escribiendo una historia de trabajo, innovación y orgullo compartido.

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