Los eventos son parte de la vida social humana, hasta una pequeña reunión entre amigas podría catalogarse como “un evento”, así que forman parte de nuestra inherencia como especie desde nuestra mismísima concepción. Y es que estos nos brindan la oportunidad de conectar, aprender y celebrar acompañados tanto por personas amadas como por desconocidos que simplemente tienen los mismos gustos y aficiones que nosotros. En este artículo, explicaremos cómo se pueden clasificar según varios criterios.


¿Qué es un evento?

Un evento es una actividad planificada que reúne a un grupo de personas con un propósito común. Pueden ser de diversa índole y tamaño, y se organizan con objetivos específicos que pueden variar desde la educación y el entretenimiento hasta la promoción de productos o celebraciones personales.

Importancia de los eventos

1. Conexión social: facilitan la interacción entre personas con intereses comunes, fomentando la creación de redes y relaciones.

2. Educación y aprendizaje: seminarios, talleres y conferencias son fundamentales para la difusión de conocimientos y el desarrollo profesional.

3. Promoción y marketing: las ferias comerciales y lanzamientos de productos son esenciales para las empresas.

4. Cultura y entretenimiento: festivales, conciertos, partidos deportivos y exposiciones de arte enriquecen la vida cultural de las comunidades y promueven un entretenimiento que traspasa la barrera de lo presencial gracias a sitios como Bet365 y plataformas de streaming que los retransmiten en internet.

5. Celebración: bodas, aniversarios y fiestas de cumpleaños son eventos personales que celebran momentos importantes en la vida de las personas.

Clasificación de los eventos


Para entender mejor todo lo que conlleva un evento, es útil clasificarlos en diferentes categorías. A continuación, presentamos una clasificación detallada:

Según el propósito

Eventos corporativos: son encuentros formales organizados por empresas o instituciones con fines profesionales, comerciales o de desarrollo organizacional. Su propósito principal es mejorar la comunicación, la productividad y la cohesión entre los empleados, clientes y otros interesados. De los eventos corporativos se pueden desprender dos categorías más: eventos externos y eventos internos.

Los eventos externos suelen ser abiertos al público (sobre todo a potenciales clientes) y suelen ser masivos o, al menos, multitudinarios. Los mejores ejemplos son: Conferencias, seminarios, ferias comerciales, lanzamientos de productos.

En contraparte, los internos, como su nombre indica, involucran de forma interna e íntima a los empleados que forman parte de la empresa o compañía organizadora. Por ejemplo: reuniones de negocios y cenas de fin de año.

Eventos Sociales: los eventos sociales están diseñados para celebrar, reunir y conectar a las personas en torno a momentos importantes de sus vidas. Suelen ser informales reuniones pequeñas o medianas entre amigos, familiares y conocidos. Los más comunes y conocidos son: matrimonios, fiestas de cumpleaños, aniversarios y baby shower.

Eventos Culturales: estos eventos promueven aspectos culturales, bien sea el arte, la música, la danza y otras expresiones culturales. Aquí se destacan: Los festivales que pueden ser de música, arte o gastronomía, exposiciones de arte, desfiles de moda y conciertos.

Eventos Deportivos: son actividades competitivas o de exhibición relacionadas con el deporte, las cuales pueden ser masivas, medianas o pequeñas. Se caracterizan porque los fanáticos asisten para ver, alentar y hacer apuestas por sus equipos y atletas favoritos, despertando una gran pasión en los espectadores durante el enfrentamiento entre rivales y a la hora celebrar al vencedor. Sin importar el tipo de deporte, los eventos que más se organizan son: Torneos y campeonatos, partidos amistosos, entrenamientos, exhibiciones a nivel escolar y laboral.

Eventos Religiosos: tienen un propósito espiritual y están destinados a la adoración, la celebración o la reflexión religiosa. Los más conocidos son las ceremonias como los bautizos, comuniones, bodas y funerales. Sin embargo también se deben incluir a las festividades religiosas como la Navidad, la Pascua, el Ramadán y otras festividades propias de distintas religiones.

Eventos Políticos: los eventos políticos están diseñados para promover ideas políticas, movilizar votantes y comunicar mensajes electorales. En esta clasificación principalmente tenemos a las campañas electorales y a los debates y foros políticos.

Según el Tamaño

● Masivos: Eventos que atraen a una gran cantidad de personas, generalmente más de 10,000 asistentes, como los conciertos de grandes estrellas y los torneos de fútbol de gran renombre.

● Medianos: Eventos que atraen a una cantidad considerable de personas, típicamente entre 1,000 y 10,000 asistentes. Aquí se pueden mencionar a las ferias o reuniones por festividades religiosas.

● Pequeños: Eventos con una cantidad limitada de asistentes, generalmente menos de 1,000 personas. En este grupo las opciones son tan extensas que solo por nombrar algunas podríamos mencionar a las fiestas de cumpleaños, seminarios, eventos universitarios y competiciones deportivas escolares.

Según la Frecuencia

● Únicos: Eventos que se realizan una sola vez y no se repiten en el tiempo: lanzamientos de productos, casamientos (idealmente solo es una vez para cada persona), entre otros.

● Recurrentes: Eventos que se realizan de manera periódica, ya sea anualmente, mensualmente o en otras frecuencias regulares: Conferencias, ferias, festivales, etc.

Según la Modalidad

Este criterio es fácil de entender, mucho más que los anteriores, porque se refiere a si la asistencia será física, de forma online o mixta. En base a esto, los tipos son:

● Eventos Presenciales
● Eventos Virtuales
● Eventos Híbridos

Ahora que has comprendido qué son y cómo se clasifican los eventos, estás en la capacidad de organizar alguno por tu cuenta, ya sea para aprender, celebrar, promover algo en específico o simplemente para disfrutar.