Un tribunal condenó a los dos acusados de un ataque a balazos que se cobró la vida de un joven e hirió gravemente a otros dos en el violento año de 2021. Las penas de 14 y 16 años se dictaron en un juicio abreviado, por el que los imputados reconocieron su responsabilidad en el hecho.
Hugo Alberto “Huguito del Bajo” Muñoz (22) y Brian Alexis “El Sucio” Castillo (22) se declararon culpables de haber matado a tiros a Federico “Tiburón” Picerni y de haber herido en un glúteo a su hermano Facundo y a Kevin B., quien quedó afectado de por vida por un disparo en la cabeza.
Según la investigación, los ahora condenados eran soldaditos de un transero llamado Julio “El Narigón” o “Julio Lepra”.
El hecho tuvo lugar el 27 de septiembre de 2021 en la entrada de un pasillo Lejarza 5675, en el barrio Triángulo, en el marco de broncas barriales y disputas vinculadas con el negocio del narcomenudeo, señalaron fuentes del caso.
El tirador, Brian Castillo, vació un cargador de una pistola calibre .380 contra un grupo de cinco amigos, dos de los cuales lograron salir ilesos. Todo ocurrió pasadas las 18, a plena luz del día.
“Por comentarios me enteré de que Kevin B. estaba vendiendo droga, y que el día del hecho lo estaban buscando por algún problema de plata”, declaró un testigo del fiscal Patricio Saldutti.
Kevin B., quien quedó postrado en una silla de ruedas a raíz del ataque, volvería a aparecer en las crónicas policiales por una causa de extorsiones y aprietes mafiosos, esta vez en calidad de victimario.
Un mes después fue detenido Muñoz en Cullen al 3300, el conductor del Peugeot 207 del que partieron los disparos. Al tirador, Castillo, lo allanaron en su casa de Magallanes al 3800, estuvo prófugo un tiempo, pero finalmente fue detenido.
Por esos meses de 2021, el personal de la División Homicidios de la ex Agencia de Investigación Criminal (AIC) llegó al Castillo y a Muñoz gracias a fotos aportadas por testigos que fueron cotejadas con perfiles de Facebook. Ocurre que las víctimas conocían de vista a los condenados, ya que todos vivían en el sector del oeste rosarino comprendido entre Teniente Agneta, Juan XXIII, Lejarza y Provincias Unidas.
Muñoz y Castillo fueron sentenciados por los jueces Paola Aguirre, Hebe Marcogliese y Nicolás Vico Gimena a 14 años y 6 meses de prisión y a 16 años, respectivamente, por delitos de homicidio agravado, consumado y en tentativa. En el caso de Muñoz, se sumó la portación de la pistola .380.
