La intersección de Wheelwright y Presidente Roca, plena costanera central de Rosario, fue escenario de un siniestro vial fatal este último martes. Una familia proveniente de Córdoba fue atropellada por un Peugeot 206 que iba a 120 kilómetros por hora y por el impacto, murieron la mamá y una de sus hijas. La otra de las hijas, una criatura de 6 años, permanece internada en el hospital Víctor J. Vilela. El caso conmociona a la ciudad y vuelve a poner sobre la mesa otras tragedias por irresponsabilidad al volante y circulación a extrema velocidad.
Seis casos que resonaron en la conversación pública local y una pregunta: ¿Es la imprudencia de los conductores el reflejo de una sociedad rota?
Caso Pira, 28 años de impunidad
El 2 de marzo de 1997, Sebastián Pira de 21 años conducía su vehículo Ford Galaxy a más de 130 km/h por calle Salta. Al llegar a la intersección con bulevar Oroño, el joven atropelló y mató a María Celeste Haiek de 22 años, que murió en el acto, y a Daniela Caruso de 16, quién fue arrastrada una cuadra en el capot del auto para luego ser arrollada por el Ford Galaxy. Pira huyó del lugar en ese momento.
Unos días después, Pira se presentó con su abogado en la comisaría 3° de Rosario donde quedó detenido. El juez Osvaldo Barbero caratuló el hecho como doble muerte en accidente de tránsito y derivó el caso al juez correcional Edgardo Bistoletti. El 12 de junio de 1997, el juez Osvaldo Barbero le dictó la libertad condicional. Bistoletti cambió la carátula a doble homicidio con dolo eventual y según el Código Penal debería estar entre 8 y 25 años en la cárcel.
Los abogados de Pira apelaron y en la Cámara de Apelaciones determinaron que la muerte de Daniela Caruso fue por homicidio simple y la de María Celeste Haiek por homicidio culposo. El expediente se dividió en dos, Barbero era el juez por la muerte de Caruso mientras que Bistoletti por la muerte de Haiek.
El 10 de noviembre de 1997, Bistoletti ordenó la detención de Sebastián Pira, pero ese mismo día el joven se escapó del país huyendo a Israel. Pira también estuvo en Turquía y Corea hasta que decidió radicarse en Holanda donde fue detenido el 28 de marzo de 2000 cuando lo interceptaron en el Aeropuerto de Shipol, Ámsterdam.
Quedó bajó disposición de un juez holandés que aceptó que lo extraditen a nuestro país, pero lo dejaron libre hasta que se concretará su regreso a Argentina. Cuando Interpol lo fue a buscar a la casa en agosto de 2001, Pira había huido y esa fue la última vez que lo vieron.
La causa prescribió en 2014 y Pira sigue libre.
Caso Capozucca
El 22 de mayo de 2005 se produjo la tragedia en la que Matías Capozucca manejaba un BMW a alta velocidad por avenida Rivadavia y se estrelló contra un árbol, provocando dos muertes y heridas gravísimas a otra de las ocupantes del vehículo.
Capozucca estuvo ocho meses detenido en una comisaría; cuando apelaron la primera condena, recibió finalmente tres años de prisión condicional y quedó en libertad, aunque con una restricción para manejar por diez años. Esa restricción es la que dio por cumplida la Justicia rosarina en febrero de 2018 y desde aquel momento, Capozucca no tuvo más trabas para iniciar los trámites para obtener el carnet de conducir.
Schmitt, un antes y un después en la figura de homicidio simple con dolo eventual
En marzo de 2016, en Río Negro y Campbell, Juan Carlos Schmitt, mecánico de la zona oeste de la ciudad, mató al cadete Damián Orgaz, luego de embestirlo a toda velocidad a bordo de un automóvil Audi TT que probaba.
La víctima, de 26 años, estaba trabajando como repartidor para un restobar. La Justicia pudo comprobar que el mecánico circulaba por barrio Belgrano a bordo de un Audi TT a 130 kilómetros por hora.
A esa velocidad embistió y mutiló el cuerpo de Damián.
Sin embargo, en junio de 2023, la Justicia rosarina le otorgó la libertad condicional a Schmitt. Aunque la fiscalía se había negado a otorgar ese beneficio, este fue aceptado por la jueza Eleonora Verón tras el pedido de la defensa del mecánico.
Schmitt tuvo que fijar domicilio en la región, acreditar un trabajo que no tenga relación con el manejo de autos, no tener contacto con el entorno de la víctima, no consumir alcohol ni estupefacientes y vedado salir del país .
"Qué bueno está ir a 130 k/h sin frenar"
El 6 de marzo de 2019, Gastón Dlugovitzky (21), corría picadas callejeras en San Martín y Garibaldi cuando atropelló y mató a Fabíán Cragnolino, un empleado de la comuna de Ibarlucea. Iba entre 128 y 155 kilómetros por hora, de acuerdo a lo que señaló la pericia accidentológica.
En el juicio que determinó la pena de 8 años de prisión para Dlugovitzky se expusieron grabaciones que le enviaba por WhatsApp a amigos. Entre otras cosas, se jactaba de conducir "a dos gambas treinta" por calles de la ciudad.
“Tenía el tanque lleno, bajó a la mitad y prendió reserva. Y pobre embrague”, agrega en otra parte, siempre en relación a picadas que corría a menudo. Sobre otra competición callejera cuenta: “Le gané, le saqué como siete, ocho cuadras. Crucé Ayacucho sin frenar, venían los autos de los dos lados”.
⚠️�� Impactantes audios de Dlugovitzky: se trata del joven que chocó y mató a Fabíán Cragnolino, ex tesorero de Ibarlucea, a bordo de su auto Ford Focus en San Martín al 4200.
— Rosario3.com (@Rosariotres) October 7, 2020
Días antes del choque fatal se grabó mientras corría: esto decía ���� Vía: @telenocheRos #Rosario3 pic.twitter.com/KmzDCPDPbp
La picada mortal de avenida del Rosario y Ayacucho
En marzo de 2021, David Pizzorno de 43 años y su hijo Valentino, de 8 años, perdieron la vida en la intersección de Avenida del Rosario y Ayacucho. Fueron embestidos por un vehículo, Citroen C4, que circulaba a 134 kilómetros por hora. Lo manejaba Pablo Mancini. Corría una picada contra otro auto, un Sandero, que iba a 12. kilómetros por hora. Germán Schoeller conducía este último.
En octubre de 2024 bajaron la condena a uno de los conductores. La Cámara de Apelaciones en lo Penal redujo la pena de Mancini, quien manejaba el C4 que participó en el hecho. Pasó de 12 años de cárcel a 8 años, según el nuevo fallo, que lo consideró partícipe secundario y no coautor del hecho.
El fallo, que lleva las firmas de los camaristas Tomás Orso, Daniel Curik y Guillermo Llaudet, modificó la calificación legal del conductor del C4, que pasó de ser considerado coautor del hecho a tener "participación secundaria".
Ante esto, Cintia, la madre de Valentino y esposa de David, sentenció indignada: “Estos jueces no tienen familia. Es una burla, no vieron las pruebas”.
A 115 kilómetros por hora en Córdoba y Francia
Otro caso es el ocurrido en noviembre de 2021 cuando se produjo, a la madrugada, un violento choque en la transitada esquina de avenida Francia y Córdoba.
Dos autos impactaron y uno de éstos, por informes de fiscalía, clavó su velocímetro en 120 km/h.
A raíz del impacto, los ocupantes de ambos vehículos debieron ser hospitalizados. Uno de los conductores, el del Volkswagen Bora, quedó internado con custodia policial en aquel momento.
En febrero de 2023 fue condenado a 5 años de prisión efectiva y 10 años de inhabilitación especial para conducir por las lesiones que le produjo a dos personas en un siniestro vial ocurrido en la zona del macrocentro bajo los efectos de sustancias tóxicas.
Ese día, David Hidalgo manejaba borracho y drogado a 115 kilómetros por hora. Había, además, cruzado varios semáforos en rojo. Tenía 1,2 g/l de alcohol en sangre y cocaína, de acuerdo a los exámenes realizados luego del siniestro vial.
Chocó contra un Peugeot 208, cuyo conductor sufrió lesiones graves, como fracturas en clavícula y costillas. Después del choque, la fiscal informó que en el lugar "no había marca de frenado" y que sí se detectó una "marca de arrastre" de 22 metros.
