El tipo de casas que la AFA les entregó a los inundados de Bahía Blanca ahora se venden en Internet, más precisamente en la plataforma de Mercado Libre. Cuestan $1.932.000, incluso con descuento y posibilidad de seis cuotas sin interés.
Según el vendedor, se trata de un espacio de 20 metros cuadrados que cuenta con cuatro espacios distintos: una cocina comedor (3x2), dos dormitorios (3x2) y un baño (1x2).
La propiedad es vendida por una cuenta que en redes sociales se hace llamar como “Viviendas pre” y que en la plataforma aparece como Juan Cárdenes.
En el detalle, el vendedor aclara que el envío y la colocación de la casa se abonan aparte y que él solo hace trabajos dentro de la provincia de Buenos Aires.
Cómo son las casas que entregó la AFA en Bahía Blanca
La publicación aparece horas después de un informe que realizó TN en el que muestra el estado en el que se encuentran las casas prefabricadas que construyó la AFA para los inundados en Bahía Blanca.
Los goles llegaron: cinco en partidos oficiales (cuatro ante Brasil y uno frente a Uruguay) y dos más sumados como “gesto extra” tras un amistoso entre la Selección mayor y la Sub-20. El saldo fue de siete casas.
Las viviendas llegaron recién entre fines de julio y comienzos de agosto, varios meses después de la inundación. Para entonces, la urgencia seguía intacta. Pero la sorpresa fue mayor cuando las familias vieron qué era, en los hechos, “la casa de la AFA”.
Se trataba de casillas de madera extremadamente precarias, sin aislación térmica ni acústica, con filtraciones visibles y estructuras endebles, clavadas de manera rudimentaria.
Uno de los puntos más graves fue la falta de servicios básicos. Durante meses, las casas no tuvieron cloacas.
Las familias —con chicos— debieron hacer sus necesidades en baldes dentro de la vivienda. “Yo tenía el olor adentro de mi casa, en las cortinas, en todo”, contó una mujer con el medio citado.
Recién semanas atrás comenzaron a hacerse los pozos, pero al momento del testimonio todavía no había avances visibles para la conexión definitiva.
El interior de las casas refleja la precariedad: una única habitación que oficia de dormitorio, comedor y cocina, y un baño mínimo.
El “aislante” es apenas una tela sujeta con cinta adhesiva. En algunos sectores, la luz del día entra directamente desde afuera, dejando en evidencia la falta total de hermeticidad frente al frío, el viento o la lluvia.



