El papa Francisco recibió al cantante de Callejeros al momento de la tragedia de Cromañón, Patricio Fontanet en una audiencia privada que mantuvieron en la Casa de Santa Marta, en el Vaticano. El encuentro fue en el marco de un pedido de la organización de sobrevivientes y familiares de víctimas, por el libro Voces Tiempo Verdad, de "No Nos Cuenten Cromañón" (NNCC).

También estuvieron presentes el baterista Luis Lamas y el percusionista Juano Falcone, todos integrantes del grupo Don Osvaldo. Fue Roberto Carles, exembajador argentino en Italia durante la gestión de Alberto Fernández, quien impulsó la reunión.

El baterista contó que Bergoglio "estaba muy interesado por conocer todas las actividades que realiza NNCC: las charlas en los colegios, el acto de los 30 de diciembre en el Obelisco y que el libro haya sido presentado en toda la Argentina para mantener la memoria viva, Francisco sigue de cerca todas las cuestiones a nivel social que están pasando en nuestro país y se lo notaba con cierta preocupación".

Además, Francisco explicó que no puede "olvidar a los chicos de Cromañón, a sus padres y a sus familiares" y pidió "que les hagan llegar mi recuerdo y mi cercanía".

De acuerdo a las publicaciones de la organización NNCC en redes sociales, en el encuentro, "Francisco se mostró muy conmovido por la lucha que vienen sosteniendo los sobrevivientes durante casi 20 años".

“Mientras pasaba las páginas, Francisco nos dijo que el libro era muy importante para ejercitar la memoria, y contar lo que verdaderamente pasó en Cromañón. Cuando llegó al final, volvió a una foto de Estela de Carlotto en un acto de NNCC y se refirió a la presidenta de Abuelas con palabras de reconocimiento por el compromiso y la veracidad que aporta su presencia", relató Lamas.

En el posteo, detallaron que la reunión duró más de una hora y el Papa "contó que recordaba los hospitales que recorrió la noche del 30 de diciembre de 2004, las misas que ofreció para familiares y sobrevivientes, de los que siempre estuvo cerca cuando era Arzobispo de Buenos Aires, y de las agresiones que recibió en la Catedral por interesarse por los músicos de Callejeros".