A través de una “entrega controlada”, personal de la Policía de Investigaciones (PDI) detuvo en Granadero Baigorria a un hombre de 38 años acusado de estafas reiteradas a una mueblería céntrica, donde adquirió muebles por más de seis millones de pesos utilizando datos de tarjetas de crédito ajenas. Este fraude provocó un perjuicio millonario para el comercio, ya que, una vez entregados los productos, las compras eran rechazadas por los verdaderos titulares de las tarjetas.
Según voceros de la PDI, la investigación comenzó a raíz de una denuncia presentada por la propietaria de Click Muebles, un comercio ubicado en San Martín al 1200. La dueña relató que, a través de su tienda en línea, un usuario realizó compras durante varios meses por un total de seis millones de pesos.
La particularidad del caso radica en que las compras se concretaron con diversas tarjetas de crédito y que el comprador gestionaba el retiro de los muebles mediante un flete propio, siempre coordinado por el mismo número de WhatsApp. Sin embargo, en todos los casos, las compras eran rechazadas o reportadas como "desconocidas" una vez que los productos ya habían sido entregados.
El miércoles 15 de enero, la mueblería recibió una nueva solicitud de compra, esta vez con el mismo método de entrega. Para evitar otro perjuicio, alertaron al Ministerio Público de la Acusación (MPA), y el fiscal Federico Rébola dispuso que personal de la PDI investigara lo que parecía una nueva estafa inminente.
A través de un oficio judicial, el fiscal solicitó un seguimiento para identificar al transportista encargado de retirar la mercadería adquirida fraudulentamente. En coordinación con los propietarios del comercio, se decidió llevar a cabo una entrega vigilada.
El viernes por la tarde, el transportista acudió al local para retirar los muebles. Tras la entrega, se implementó un operativo de seguimiento que culminó en Brown al 1100, en Granadero Baigorria.
"Inmediatamente, se informó al fiscal, quien ordenó un allanamiento en el domicilio del sospechoso, con la autorización judicial correspondiente", indicaron voceros policiales.
Durante la irrupción, se secuestraron tres teléfonos celulares, un sommier doble, un sillón París con esquinero, un cuaderno con anotaciones relacionadas con tarjetas de crédito, un sommier de dos plazas, tarjetas de crédito y más anotaciones. El detenido, Carlos C. (38), fue trasladado a la sede de la PDI a disposición del fiscal Rébola.
Se sospecha que el acusado obtenía los números de las tarjetas y los datos de sus titulares para realizar las compras fraudulentas. Además, se encontraba cumpliendo una condena (los detalles no trascendieron) por la que había obtenido recientemente salidas transitorias de las que no regresó, y por ello tenía además un pedido de captura vigente, según informó un vocero judicial.